Osteopatía
Una de las técnicas manuales más eficaces que existen
La Osteopatía es una técnica que se basa en la idea de que el cuerpo es una unidad conjuta, y todos los sistemas dependen unos de otros. De esta forma podemos concluir que la Osteopatía es una técnica holística que busca la raíz del problema para restaurar la funcionalidad del cuerpo desde el origen1.
La Osteopatía en muchos paises es una técnica médica que trata las articulaciones del cuerpo y sus posibles deficiencias de movilidad a través del tratamiento manual. Esta técnica ha ido evolucionando desde la antigüedad hasta que en 1892 Andrew Taylor Still2, considerado el padre de la Osteopatía, funda en Kirksville, Missouri, la Escuela Americana de Osteopatía, contribuyendo así a su desarrollo definitivo como práctica médica reconocida en la mayor parte de los paises occidentales. La Biomecánica humana es compleja y la Osteopatía se encarga de que todas las articulaciones mantengan, o recuperen en su caso, su funcionalidad. De este modo se convierte en una técnica de salud fundamental, tanto para recuperar como para evitar aquellos problemas en que la Osteopatía es especialmente resolutiva. En la actualidad, en la mayor parte de los paises europeos, donde la Osteopatía se encuentra reconocida como parte de la medicina oficial se recomienda al menos una visita mensual al osteópata con caracter totalmente preventivo. La Osteopatía no es una técnica invasiva ni brusca ni tiene porqué ser dolorosa. Sin embargo suele ser muy resolutiva. Se podría decir que la Osteopatía se divide en tres ramas, Osteopatía Articular, Osteopatía Craneal y Osteopatía Visceral.
La Osteopatía Articular es la rama de la Osteopatía más ampliamente conocida y reconocida en el mundo1. Es la parte de la Osteopatía que se encarga del sistema músculo-esquelético, es decir las articulaciones y todo lo que las une y las hace trabajar adecuadamente. La Biomecánica del organismo humano es sumamente compleja y lo hace a la vez un organismo fascinante y frágil, frágil en cuanto a que es habitual que éste pueda perder su equilibrio. Algunas articulaciones entran en un proceso de disfunción tras haber sufrido un traumatismo leve, un movimiento repetitivo, una sobrecarga puntual, o incluso a veces una mala postura mantenida. Es posible que la articulación vuelva a su funcionalidad normal después de un periodo de descanso o una vez superado el proceso desencadenante de la disfunción. Pero también es posible que no lo haga y ahí es donde entra la Osteopatía Articular, la cual mediante un sistema propio de valoración establece cómo hay que actuar para reestablecer la funcionalidad perdida.
La también llamada en algunos países Medicina Manipulativa Osteopática2 es sobre la que el fundador de la Osteopatía sentó sus bases. “El cuerpo es una unidad”, postula que el cuerpo no funciona como un conjunto de órganos si no como un organismo único. “La estructura gobierna la función”, aunque más bien es: “La estructura y la función están interrelacionados”, esto nos dice que tanto el órgano depende de la estructura que lo sustenta, como la estructura del órgano. “El cuerpo tiene la capacidad de regularse y curarse a sí mismo”, él expuso que el cuerpo humano tiene la capacidad inherente de curarse a sí mismo, siempre y cuando tenga las condiciones necesarias para hacerlo. Y el último principio “La terapia racional se basa en la consideración de los tres primeros principios”, él decía que aplicando esos principios podríamos considerar que la terapia se había realizado correctamente3.
Por otro lado el campo de aplicación de la Osteopatía Articular es muy amplio, habiendo obtenido resultados, a veces sorprendentes, en casos tan variados como hernia discal4, tendinitis5, dolor de espalda6,7, bursitis8, etc. Es precisamente esta eficacia la que ha servido de aval para que forme parte del sistema sanitario en países como Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Bélgica, Italia, Alemania, Austria, etc. Es en estos países donde la Osteopatía puede tratar oficialmente estos problemas, por eso las referencias bibliográficas apuntan a textos extranjeros. En España la Osteopatía aún está pendiente de regulación por eso es por lo que oficialmente solo puede tratar estos problemas bajo prescripción facultativa. Todas las referencias que se puedan encontrar en esta página con respecto a tratamientos osteopáticos de enfermedades enlazarán a textos en los países antes mencionados donde la Osteopatía está plenamente reconocida y el texto es legal de pleno derecho.
Obviando las vicisitudes legales especificas españolas, la Osteopatía se viene practicando, en España, desde hace unos 20 años, es muy reciente si pensamos que Andrew Taylor Still la creó a finales del siglo XIX. Sin embargo es un tiempo más que suficiente que avala el hecho de que en España existen osteópatas perfectamente cualificados y con un nivel de profesionalidad que nada tiene que envidiar a ningún país donde la Osteopatía sí se encuentre oficialmente reconocida. De esta forma podemos asegurar que la práctica de la Osteopatía en España se realiza con el mismo rigor y profesionalidad que en cualquier otro sitio.
Referencias:
(2) Medicina Manipulativa Osteopática
(3) Principios de la Osteopatía
(4) Hernia discal
(5) Tendinitis
(6) Dolor de espalda
(7) Dolor de espalda
(8) Bursitis
En 1899 William Garner Sutherland, alumno de Andrew Taylor Still, señaló que los 26 huesos del cráneo están conectados por articulaciones modificadas que no obstante permiten un pequeño grado de movimiento fisiológico expresado en el cráneo a través de sus membranas y líquidos (Líquido cefalorraquídeo concretamente). A este movimiento le llamó “Movimiento respiratorio primario”. Este movimiento está fuera de nuestro control, es decir que entraría dentro de los movimientos involuntarios de nuestro organismo1.
A través de una valoración de este movimiento, se puede llegar a saber si está alterado de alguna forma concreta y en consecuencia por medio de una serie de manipulaciones regularlo.
Existen varias evidencias científicas que corroboran la existencia de este “movimiento respiratorio primario” pero no existen evidencias de que un
ser humano sea capaz de sentirlo ni tampoco de manipularlo2.
No obstante desde 1899 hasta hoy la Osteopatía Craneal ha cosechado muchos logros allí donde otras técnicas habían fracasado. Dado que es una disciplina relativamente nueva y maneja conceptos que hasta hace realmente poco tiempo no se han podido demostrar, es factible pensar que en un futuro cercano tenga el completo apoyo de la comunidad científica de la misma forma que la Osteopatía Articular lo tiene ya.
La Osteopatía Visceral es la parte de la Osteopatía que se encarga de las relaciones de movilidad de los órganos internos, así como del movimiento entre estos1. Afirma que para el mantenimiento de la salud es indispensable que se mantengan estas relaciones de movilidad, dado que en caso contrario los órganos afectados empezarían a ver comprometida su función o funciones, y de esta forma se perdería el estado de salud.
Así mismo es importante su relación con las estructuras adyacentes, como por ejemplo el hígado con la parrilla costal derecha, de la cual se ocupa la Osteopatía Articular. De este modo no podemos concebir una Osteopatía holística o completa sin tratar todas las estructuras de movilidad del organismo humano, en este caso las vísceras y órganos internos. Desde la comunidad científica internacional no existe un apoyo unánime a esta técnica ni a sus propuestas, como en el caso de la Osteopatía Craneal, sin embargo de la misma forma se han hecho grandes progresos en países como Francia donde sí tiene un amplio reconocimiento.
Referencias: